El universo de la coctelería no es nuevo. Basta con mirar alguna película clásica, basta volver a algunas series donde recrean los 60, 70 u 80, basta con entrar a una librería y encontrar secciones destinadas a libros de coctelería.
Sin embargo, a lo largo de los años la coctelería ha experimentado cambios (incluso reversiones de los cócteles más clásicos), ha explorado en terrenos nuevos (como la botánica y la mixología), se ha adaptado a los cambios y ha dado lugar a nuevxs protagonistas (mujeres al frente de una barra). Esta trayectoria ha despertado el interés de maestros y aprendices que hoy se animan a tomar clases por hobbie, por oficio o para dar sus primeros pasos en este arte.
La definición de coctelería proviene del inglés cocktail que significa «cola de gallo». Aunque su significado varía un poco dependiendo del autor, todos coinciden en que es el estudio de la relación entre las bebidas y las frutas, flores, hierbas y helados. Además, incluye la mezcla de cualquier otro ingrediente comestible que pueda ser transformado en líquido por distintos métodos de preparación.
Los cócteles como tal comenzaron a hacerse populares en Estados Unidos a finales del siglo XIX y han llegado hasta nuestros días incluso atravesados por épocas de crisis, como en la ley seca estadounidense. En el siglo XX se convirtieron en símbolo de distinción, los lugares de moda de Norteamérica y Europa comenzaron a servir mil y una creaciones, las diferentes guerras mundiales y los contingentes americanos ayudaron a extenderlo más todavía y con todo ello alcanzamos la actualidad.
Existen diferentes criterios para categorizar los cócteles: según la bebida alcohólica usada (ron, tequila, vodka, gin), según la manera de servirse (en las rocas, en tumbler, en jarra), según el sabor (cócteles dulces, cócteles tropicales o afrutados, cócteles picantes). Hay sin embargo una forma universal de subdividir los tragos en dos grupos: tragos cortos y tragos largos.
Si vamos a los cócteles más clásicos podemos encontrar:
Old Fashioned: Azúcar, bitter amargo de angostura, whisky bourbon.
Dry Martini: Ginebra, vermouth blanco, aceitunas verdes, corteza de limón.
Manhattan: Whiskey (de centeno o canadiense) y vermut rojo.
Negroni: Gin, Campari y Vermú rojo
Aperol Spritz: Champagne, Aperol, Agua con gas, Naranja
Tom Collins: Gin, jugo de limón (mejor que lima), soda o agua con gas, azúcar, hielo
Otros cócteles muy elegidos son:
Caipirinha: Aguardiente cachaça, lima, azúcar moreno.
Bloody Mary: Vodka, tabasco, salsa perrins o salsa worcestershire, sal de apio, pimienta negra, consome de buey, jugo de limón, jugo de tomate.
Margarita: Tequila, triple seco y jugo de lima o limón.
Mojito: Azúcar blanco, hierbabuena, lima, ron cubano, soda.
Las coctelerías favoritas de los cordobeses:
La Cova del Drac (Belgrano 892, Güemes)
Francis (Achával Rodríguez 244, Galería Barrio)
Apartamento (Achával Rodríguez 365, Güemes)
Saint Gallen (24 de septiembre 1035, Gral Paz)
Cobbler (Rafael Nuñez 4580)
X bar (M.T. de Alvear 360, Centro)
Bela Lugosi (Belgrano 1008, Güemes)
Camelia cocktails bar (Ayacucho 538m Güemes)
Astor (Av. Vélez Sarsfield 365, Centro)
Roxy Demodé (Fructuoso Rivera 241, Güemes)
COC (Río de Janeiro esquina, Lisboa 22, Villa Allende)
Las mujeres y su rol en la coctelería:
Hoy en día cada vez más las chicas se paran detrás de las barras y desarman prejuicios que, aun hoy, sobrevuelan los bares. Una nueva generación de bartenders mujeres que proponen talleres, movidas gastronómicas, diseñan nuevos espacios y crean nuevos elixires para sus barras:
Ingrid es mprendedora autogestiva, hace 2 años lanzó «Piba Cóctel» una marca de cócteles embotellados que funcionó muy bien en pandemia. Hoy da clases con degustaciones cada mes (viajando y llevando sus clases a los lugares que visita), diseña recetas, e invita a probar sus cócteles en algunas ferias de Córdoba y eventos. A partir del sábado 5/11 lanzaron «Sábados con las pibas» un proyecto en conjunto con el bar Lupulus en donde comparten barra con otras bartenders con el fin de apoyar el trabajo de las mujeres detrás de barra.
Pipi Yalour es bartender, pedagoga y yogini. Empezó a trabajar en gastronomía apenas se recibió de Licenciada en Ciencias de la Educación. Iba a ser un trabajo temporario, pero terminó convirtiéndose en su carrera. Trabajó en bares que resultaron emblema de la coctelería de Córdoba como Blacksheep, Milk, Apartamento y -más recientemente -Francis. En 2018 fue embajadora de Campari en Argentina, y viajó por ciudades de Argentina, Italia (también estuvo en Londres) dando charlas y preparando cócteles. Ese mismo año publicó su libro Detrás de Barra: manual de coctelería. Entre el 2019 y el 2020 Pipi se animó a un nuevo formato y así surgieron dos proyectos de podcast. En Ricos y Famosos habla sobre cócteles emblemáticos, junto a Jopi Heinz. En El Amor Vence al Ocio comparte micrófono con Romi Kid. Juntas nos divierten con anécdotas tomando como ejes un ingrediente en común, uno polémico (caramelos media hora, mondongo, pasas de uva y más) y uno que estan aprendiendo a usar en cada episodio. Por si fuera poco, hace dos años que envía cada lunes un newsletter sobre bebidas y temas vinculados al trabajo en bar. Una especie de “caja de pandora bajo control: sabés que va a ser algo dentro de ese área de conocimiento, pero cada semana el tema es una sorpresa”.